La existencia hoy ofrece facilidades que hasta hace poco hubieran sido solo sueños. Muchos avances logrados se basan en principios simples aplicados con creatividad; sin embargo, a veces nos enfrentamos a retos grandes. Un ejemplo sería iniciar un negocio propio, con todo el papeleo involucrado, y entre ellos destaca la obtención del certificado del registro mercantil.
Sin ese importante documento ninguna firma puede operar legalmente. Es además un aval para proveedores, socios y clientes. Por tanto, resulta lógico pensar que el trámite es un proceso sencillo. El problema se presenta cuando nos damos cuenta de que hacerlo nos consumirá ingentes cantidades de tiempo.
La razón es sencilla
No estamos claros con el procedimiento y los conocimientos técnicos relacionados, cayendo en el viejo sistema de aprendizaje por ensayo y error. Por otro lado, las gestiones ante organismos del estado, en general, implican largas colas de quienes intentan ahorrar dinero haciéndolas ellos mismos. Allí es donde debemos recordar que el tiempo es oro.
Por fortuna existen gestorías administrativas. Empresas integradas por profesionales universitarios de probada formación y experiencia en las áreas civiles, mercantiles y jurídicas. Este trabajo les es simple, porque ya lo han hecho antes. Asimismo, cuentan con los recursos, de modo que ni siquiera tengamos que desplazarnos a sus oficinas.
El esfuerzo vale la pena
Los seres humanos somos gregarios por naturaleza. En los albores de la civilización esto nos permitió alcanzar los niveles de supervivencia requeridos para crecer y desarrollarnos como sociedad. Gracias a ello crecimos en inteligencia, comportamiento e interacciones más complejas que otras especies.
No obstante, en aquellos momentos en que se solicita nuestra atención urgente a múltiples diligencias tediosas, desearíamos ser capaces de dejarlo todo y vivir solamente de la recolección, la caza y la pesca, igual que al principio. Mas no desesperemos.
El camino al éxito no es fácil, pero si otros lo han logrado, nosotros también podemos. Entremos al grupo de las ideas productivas, demos los pasos necesarios y apoyados en la asistencia de un gestor hagamos con efectividad lo que debamos para obtener los documentos que requiere nuestro negocio, empezando con el certificado de registro mercantil.